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Viaje a la Costa Azul y en el tiempo a través de la historia de la F-1

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En el Grand Prix de Mónaco Historique se vive la emoción de las carreras y los bólidos de antaño. Cada dos años, 14 días antes del Gran Premio de Mónaco de Fórmula Uno, las calles del principado se convierten en un circuito cerrado que acoje a los mejores pilotos y sus extraordinarios bólidos históricos para competir, en el mismo trazado de antaño, reviviendo los orígenes de la competición más elitista del mundo.

UN FIN DE SEMANA CON GT-CLUB COMPARTIENDO GLAMOUR Y LEYENDAS DEL AUTOMOVILISMO

El fin de semana de 11, 12 y 13 de Mayo, GT-CLUB organizó para 6 de sus socios y sus esposas, un viaje a la Côte d´Azur coincidiendo con la celebración del Grand Prix de Monaco Historique.

LLegada al Grand Hotel du Cap-Ferrat,
los automóviles excepcionales se mimetizan con un entorno único en el mundo.

Un hotel digno de las estrellas de Hollywood que lo visitan desde hace casi un siglo.


Desayuno al sol de la Riviera, momento mágico que presagia un gran día



Tomando como centro de operaciones un hotel mundialmente famoso por su situación, en el centro de la península de Saint-Jean-Cap-Ferrat, el lugar más exclusivo de la Côte d´Azur, y por un servicio propio de otros tiempos, favorecidos por una climatología primaveral y con el ambiente de cordialidad que ya es un sello de valor en las actividades de GT-CLUB, el fin de semana se convirtió en una experiencia inolvidable.


Tras una noche de descanso, en la jornada del Sábado el grupo de automóviles del Club, formado por un Ferrari 458, un McLaren MP4 12C, un Bentley Continental GT, un Mercedes SLS y un Maserati Gran Turismo S llegó serpenteando junto al mar por la Basse Corniche hasta llegar a Monte-Carlo.

Aunque parezca increíble,
los coches del
Club no llamaban demasiado la atención circulando por la Basse Corniche.


Ferrari 625 TRC Spider de 1957,
adquirido por más de 5.000.000 €



La primera parada en Mónaco fue para acceder a la subasta de automóviles de colección más importante del año. Organizada por la empresa americana RM Auctions, pudimos admirar decenas de automóviles legendarios, con precios de salida intermedios que superaban fácilmente los 600.000 euros.

Impresionante el despliegue de joyas mecánicas reunido para la subasta de RM.
En la foto, un rarísimo Rolls-Royce Phantom II Roadster de 1930.

La segunda parada, en el puerto de Mónaco, convertido durante ese fin de semana en los boxes de un evento único en el mundo.

Más de 100 monoplazas de Gran Premio, piezas únicas, reunidos bajo las carpas y ante la admiración de expertos aficionados venidos de los 5 Continentes para ver cómo se pilotaban en los años 30, 40, 50, 60 y 70 los que en cada época fueron los coches de competición más rápidos del mundo.


D. Joaquin Folch al volante del McLaren M19C


Con un solo representante español en F1, el Socio de Honor de GT-CLUB, Joaquín Folch-Rusiñol, compitiendo en dos categorías al volante de un McLaren M19C de 1972 y de un Ferrari 312 T3 de 1978 (ex Villeneuve), la lista de inscritos hacía que, simplemente, no supiéramos donde mirar de tantos puntos de interés como surgían a cada momento.

Como antaño, los boxes eran un lugar "sociable", donde ver y, sobre todo "tocar" los bólidos de competición, como este March 701 de 1970, era todavía posible.

El Tyrrell P34 de 6 ruedas de 1976 fue una de las joyas más admiradas

Espectacular el pilotaje de Frank Stippler sobre este Maserati de 1934

Paseo matinal por los jardines de la Villa Ephrussi

El Domingo por la mañana aprovechamos el día espléndido para visitar la Villa Ephrussi, probablemente la mansión más valiosa de la Riviera francesa, un palacete construído a principios de siglo XIX para una de las mujeres más ricas del mundo, la Baronesa Beatrice de Rothschild.

Sus 9 jardines, con vistas magníficas a ambos lados de Saint-Jean-Cap-Ferrat, fueron perfectos para un paseo matinal antes de emprender el regreso a casa.

Eden Roc: un restaurante junto al mar para un almuerzo memorable al aire libre.

Por supuesto, la parada para comer durante el trayecto fue en otro lugar excepcional: el Restaurant Eden Roc de Cap d´Antibes es absolutamente imprescindible para quien desea disfrutar del glamour incomparable de la Riviera en la que, desde hace siglos, habitan algunos de los hombres y mujeres más afortunados del mundo.

En breve, os seguiremos informando de los próximos viajes y actividades de GTCLUB, como el inminente viaje a través del Tirol austríaco y los Alpes suizos con destino al más famoso Concorso d´Eleganza


Hasta pronto !

Albert Castelló

Fotos de Xavier Pladellorens

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