La Escuela Esther Bosch impulsa la 'operación bikini' con danza: el camino hacia un cuerpo y mente en forma

• Bailar es más que movimiento, es un lenguaje universal que conecta el cuerpo, la mente y el alma.
• La danza es un camino hacia el bienestar, que libera tensiones y despierta la creatividad.

"Bailar no solo es una forma fantástica de ponerse en forma, sino que también es una herramienta poderosa para conectar con uno mismo y liberar emociones", explica Esther Bosch. "En la Escuela Esther Bosch, promovemos el ejercicio físico a través del arte de la danza, porque creemos que moverse al ritmo de la música es una de las maneras más completas y alegres de mantenerse saludable".



Beneficios físicos de la danza:
1. Mejora la resistencia cardiovascular: Bailar incrementa el ritmo cardíaco, fortaleciendo el corazón y mejorando la circulación.
2. Tonifica y fortalece los músculos: Desde los abdominales hasta las piernas, todos los músculos se activan durante el baile.
3. Quema calorías y ayuda a perder peso: Dependiendo del estilo, se pueden quemar entre 200 y 500 calorías por hora.
4. Mejora la coordinación y el equilibrio: Los movimientos precisos requieren concentración y control del cuerpo.
5. Aumenta la flexibilidad y mejora la postura: Muchas disciplinas de danza implican estiramientos que incrementan la movilidad articular.



Beneficios emocionales de la danza:
1. Reduce el estrés y la ansiedad: La conexión con la música libera endorfinas y reduce el cortisol.
2. Aumenta la confianza y la autoestima: Aprender nuevas coreografías y dominar movimientos refuerza la autoconfianza.
3. Fomenta la expresión personal: Permite liberar emociones y canalizar sentimientos a través del movimiento.
4. Mejora las relaciones sociales: Las clases de baile suelen ser ambientes positivos que fomentan nuevas amistades.
5. Estimula la creatividad y la memoria: Recordar pasos y combinaciones coreográficas ejercita la mente.
"La danza es una forma de ejercicio que desafía al cuerpo y al espíritu a la vez, ofreciendo beneficios que van mucho más allá de lo físico", añade Bosch. "Es un espacio de liberación, expresión y crecimiento personal."
Para aquellos que buscan una alternativa a los entrenamientos tradicionales para la 'operación bikini', la Escuela Esther Bosch ofrece una amplia gama de estilos, desde salsa y flamenco hasta hip hop y danza contemporánea, para que cada persona pueda encontrar su ritmo perfecto.

Esther Bosch, referente de la danza en Barcelona

15 años, 3 escuelas, más de 1.000 alumnas y su propia marca de ropa de danza EBB Wear

La bailarina, emprendedora y directora Esther Bosch se ha consolidado como una figura clave en la escena de la danza en Barcelona. Su escuela, con tres sedes en Sarrià, Sant Cugat y Bonanova, ha creado un modelo único que va más allá de las aulas, con un enfoque que combina formación artística, crecimiento personal y comunidad. Hoy, más de 1.000 alumnas se forman bajo su sello.



Un sueño que se transforma en comunidad
Esther Bosch es más que una escuela de danza. En estos 15 años ha creado un modelo propio: un estilo, una forma de enseñar y de entender la danza que se transmite tanto en sus clases como en su marca de ropa, EBB Wear. Lo que comenzó como un pequeño proyecto de barrio en 2010, con dos aulas y 250 alumnas, es hoy una red de tres escuelas con 17 profesores y un equipo que comparte una misma visión.
Esther estudió Derecho en la Universidad de Barcelona y, aunque inició su carrera en el mundo jurídico, nunca dejó su verdadera pasión: la danza. Compaginó durante años su trabajo en el departamento legal de Pepe Jeans con sus clases como profesora de baile, hasta que decidió apostar por su sueño. Hoy, además de liderar sus escuelas, es madre de cuatro hijos, un ejemplo de equilibrio entre vida personal y profesional.



Una escuela con valores
"Hemos formado una familia donde se cultiva el respeto, el trabajo en equipo, la deportividad y el apoyo mutuo", explica Esther Bosch.
Desde el primer día, su proyecto ha promovido la libertad de expresión, la diversidad y la inclusión, y un profundo compromiso humano con el crecimiento personal de cada alumna.
La danza permite reconectar con el cuerpo, con las emociones y con el presente. Ayuda a construir autoestima, a liberar bloqueos, a tomar conciencia de los límites y también de las propias capacidades. Enseña disciplina y perseverancia, y al mismo tiempo fomenta el juego y la creatividad. Para muchas personas, bailar es sanar.



15 años creando una visión colectiva
“Aprendí que liderar no es controlar, sino inspirar. Que una visión clara necesita flexibilidad para evolucionar. Que los desafíos más grandes muchas veces son los que nos obligan a reinventarnos y crecer. Y, sobre todo, que una escuela no es un espacio físico ni un nombre: es la energía, las personas y los valores que la sostienen día a día”, afirma la fundadora.
Esther ya no está sola marcando el ritmo. Hoy cuenta con un equipo consolidado que crea, propone y transforma junto a ella.

Clases, disciplinas y estilo propio
Aunque la escuela se especializa en danza infantil, ofrece clases para todas las edades: desde los 4 años hasta adultos y seniors. El jazz es su disciplina matriz, pero también se imparten lírico, sevillanas, comercial, pilates, yoga, ballet fit o entrenamiento funcional. La joya de la escuela sigue siendo el Videoclip, un formato desenfadado y con identidad propia que ha enamorado a centenares de alumnas, tanto en modalidad amateur como profesional.

Los Summer Camps: una experiencia transformadora
Cada verano, las alumnas viven dos semanas de inmersión total en danza y naturaleza en la Val d'Aran. Las actividades como rafting o tirolina fortalecen vínculos y ofrecen una vía distinta para acercarse a la danza. Además, la escuela de Barcelona permanece activa durante los meses estivales con intensivos en distintas disciplinas.

EBB Wear, la moda de la danza con identidad
En 2015, Esther lanzó su propia línea de ropa: EBB Wear, con diseños cómodos, urbanos y pensados para bailar. El showroom dentro de la escuela y su canal en Instagram permiten adquirir desde maillots hasta sudaderas y culottes con estilo propio.
"No había moda en el aula. Empezamos a crear ropa que rompiera con la estética clásica del blanco, negro y rosa", cuenta Esther.

Esther Bosch, bailarina, emprendedora y madre
Desde que empezó a bailar a los cuatro años, su vida ha girado en torno a la danza. A los 18 ya era profesora y, tras años de combinar su vocación con el mundo legal, en 2010 dio el salto: fundó su primera escuela. Hoy, Esther Bosch no solo es referente en la danza, también lo es como mujer, emprendedora, madre de cuatro hijos.

Web: estherboschdanza.com | Instagram: @estherboschdanza

ESCUELAS:
Ronda General Mitre 16, 08017, Barcelona.
Vilana 4, 08022, Barcelona.
Centro Comercial Mira-Sol, Plaza Ausiàs March s/n 08195, Sant Cugat.