El nombre de este Bentley, tiene su origen en Gran Canaria, en una formación rocosa llamada Roque Bentayga, además, de “taiga”, que es la vegetación frondosa de zonas donde reina el clima continental frío como Rusia, Siberia, Escandinavia o Canadá de aquí viene la inspiración por su nombre, acertado claro está.

Su diseño está basado en el Continental GT y el Flying Spur, sobre una carrocería imponente a la vista, que proviene de la plataforma MLB II del Grupo Volkswagen, la misma utilizada para el nuevo Audi Q7 o el Volkswagen Touareg, pero con claras modificaciones, y con un 80% de componentes de uso exclusivo para el Bentayga.

La enorme parrilla cromada delantera, sello de identidad de la marca, esconde tras de sí un motor W12 de 608 cv, y a sus lados, unos faros de tecnología FullLed adaptativos. Las sinuosas líneas laterales y la zaga son la máxima representación en lo que a un diseño exclusivo se refiere y trabajo del aluminio de forma casi artesanal para conseguir una figura atlética y esbelta a la vez.

En la zaga, vemos uno pilotos que, por la noche, dibujan una preciosa silueta con la “B” de Bentley invertida, que podemos encontrar también en las aletas de la parte delantera siendo estas cromadas. En la parte más baja, un pequeño difusor alberga las dos salidas ovaladas de escape por las que brama una melodía única al estirar el motor.

Sus medidas son su baza, para ser, como no, el SUV más poderoso del mundo. Con sus 5,1 metros de largo, una anchura de 1,9 metros y una altura de 1,7 metros, es sin duda, el referente de los SUV en este momento. El maletero dispone de unos generosos 413 litros de capacidad, y es totalmente personalizable por parte de su propietario, pudiendo montar en el diversos elementos que forman parte de equipamiento más exclusivo de la marca, la línea Mulliner.

Inicialmente, el Bentayga dispone de una configuración de 5 plazas, aunque puede personalizarse la parte trasera, para que disponga de dos asientos individuales, que contarán con el mismo confort y reglajes que los delanteros, disponiendo entre otros de función de masaje, ventilación o calefacción, pudiendo ampliar el equipamiento para los pasajeros con algunos de los extras disponibles dentro de sus opcionales.

Tras abrir la puerta, y acceder al habitáculo te das cuenta de que, aunque haya elementos conocidos del grupo Volkswagen, acabas de entrar en el universo de la exclusividad, no solo por el olor a piel que desprende su interior, sino por la infinidad de detalles que te hacen ver que llevas entre manos. Es la máxima expresión del lujo vista en un SUV, tanto que para hacer su interior se precisan 130 horas de trabajo artesanal llevadas a cabo por 53 personas, como podréis apreciar en el siguiente video, para tallar las siete maderas disponibles que Bentley ofrece como opción para guarnecer los interiores, entre las que encontramos nombres como Dark Fiddleback Eucaliptus, Burr Walnut o Tamo Ash que pueden combinarse a la perfección con los 15 colores de piel disponible.

Los asientos delanteros que equipaba nuestra unidad de pruebas, tienen un corte deportivo, sujetan el cuerpo a la perfección y disponen de numerosos reglajes para hacerte sentir el rey de la carretera. Tras el volante, que es multifunción e incorpora las levas para accionar el cambio de forma secuencia, encontramos un cuadro de mandos de nueva concepción, donde dos esferas separadas por un display tft que ofrece información sobre los modos de conducción la navegación, el sistema de audio o el ordenador de a bordo. Bajo las salidas de aire del centro de la consola y sus originales tiradores que permiten su apertura, encontramos una pantalla táctil de 8”, desde la que se maneja todo el sistema de info entretenimiento, así como la distribución del aire del climatizador, el equipo de sonido Naim o diversos parámetros de configuración del coche.

La consola central esta presida por el selector del cambio automático, y tras este encontramos el mando para seleccionar los diferentes modos de conducción, así como para accionar la suspensión neumática y el control del descenso en pendientes.
En lo que a equipamiento se refiere, es el Bentley más tecnológico de toda la gama, por ello, elementos como el Head-Up Display a color, el sistema de visión nocturna, las cámaras de 360º o el sistema de mantenimiento de carril, son elementos nuevos para la marca que encontramos en el Bentayga. A parte de estos más destacados, encontramos también asistente de arranque en subidas, ABS, EBD, TPMS, acceso y arranque sin llave, portón trasero eléctrico, cierre eletroneumático de las puertas, detector de coches en ángulo muerto, WI-Fi y un disco duro de 60gb entre muchos otros elementos que pueden completarse con el equipamiento opcional para dejar un Bentayga único.

Otro dato curioso es su paleta de colores, que dispone de 90 exclusivas tonalidades o bien, se puede recurrir al servicio de reproducción personalizada de colores, que será capaz de reproducir el color deseado por el cliente, así como la aplicación disponible en la Apple Store, denominada Bentley Inspirator capaz de, a través de las cámaras de tu Smartphone o Tablet, ver tus reacciones al visualizar un video que ofrece unas increíbles imágenes armonizadas con música, y ofrecerte según su lectura de tu expresión facial, la configuración ideal basada en tus gustos del Bentayga. Tengo que decir, que, tras hacer la prueba, esta aplicación escogió una configuración muy real para mi gusto, desde el color exterior hasta el del interior.
Opcionalmente se puede adquirir el paquete All Terrain que incluye protección de los bajos, sistema de cámaras 360 º, control de descenso en pendientes y cuatro programas de conducción específicos para la conducción en barro, arena, grava y nieve. Y hablando de opcionales, podemos montar en lugar del convencional Reloj Breitling que preside la consola central, el Mulliner Tourbillon, un reloj automático montado sobre una carcasa de oro macizo que puede ser blanco o rosado, al que se le encaja una esfera con ocho diamantes y que cuesta la friolera de 150.000€.

Al igual que en Mulsanne y el Flying Spur, las plazas traseras gozan de un mando exclusivo, desde el que pueden controlar la radio, ver los datos del ordenador de a bordo del coche, configurar los asientos traseros, así como la climatización de esa zona, de los propios asientos y los elementos multimedia. Como buen Bentley, la parte trasera dispone de un largo compendio de extras con lo que personalizarla.

El techo panorámico que cuenta con una superficie de 1,35 m2, ofrece una sensación lumínica muy agradable en el interior del habitáculo y de forma automática regula la entrada de la luz, para evitar que el sol llegue a ser molesto para los ocupantes del Bentayga.

El propulsor del Bentayga, su corazón, es un motor W12 de 6 litros que dispone de 608 cv y un par motor de 900 Nm disponibles entre las 1.350 y las 4.500 rpm, convirtiéndolo en un verdadero bólido que cuenta con un lastre de 2.400 kg, pero que se mueve con muchísima soltura ante cualquier situación, prueba de ello, son sus increíbles prestaciones, ya que acelera de 0 a 100 km/h en tan solo 4,1 segundos y es capaz de lanzarse hasta los 301 km.
Lleva asociada una caja de cambios automática de ocho velocidades que se puede controlar mediante las levas del volante o bien desde el propio selector del cambio ubicado en centro de la consola.
Este motor, es 30 kilos más ligero que el bloque en el que se basa, algo que ayuda a una mejora de consumo, siendo el homologado de 13,1 litros a los 100 km. Para lograr cifras contenidas, la electrónica y sistemas como la desconexión selectiva de cilindros (COD), la acción combinada de la inyección directa o la función de circulación en modo vela, siempre y cuando se circule con una marcha entrada entre la quinta y la octava.

Como no podía ser de otra manera, la marca ha llevado a cabo miles de kilómetros de pruebas, en todos los terrenos posibles, y poder así garantizar su uso tanto en asfalto como fuera de él, por ello, el trabajo en el sistema de amortiguación les ha llevado a montar dos suspensiones independientes con muelles neumáticos, que pueden ajustar su longitud y rigidez a voluntad del conductor mediante el mando de selección de modos de conducción que encontramos en la consola central y que dispone de 8 modos configurados para diferentes usos y terrenos,  como puede ser la nieve y el barro, una pista forestal, terrenos abruptos o bien para conducir en modo confort por autopista o de forma más deportiva.
La suspensión neumática, elemento que incorpora de serie, es crucial para su conducción, para garantizar no solo el confort de marcha que debes de tener en un Bentley, sino para poder disfrutar en cualquier situación de todo su potencial y comportamiento dinámico. Una de las principales novedades técnicas es el sistema Bentley Dynamic Ride, que utiliza unos pequeños motores eléctricos para endurecer las barras estabilizadoras a la hora de tomar las curvas, y de suavizarlas en las rectas, algo que aprecias, en el momento que te dispones a afrontar una carretera revirada para ver su comportamiento más deportivo.

Lo primero que percibes, cuando pones en marcha el motor del Bentayga, es que en el interior del habitáculo no se escucha absolutamente nada que venga del exterior, es como si el coche, estuviera parado. La posición de conducción tras el volante es muy cómoda a la vez que perfecta, ya que no están en una posición muy elevada, llegando incluso a estar medio encajonado lo que propicia una sensación más deportiva.
Entramos en la autopista, y empezamos a ganar velocidad tras presionar un poco el acelerador con el pie derecho, y la verdad, es que la capacidad que tiene para entregarte toda la potencia es abismal, tanto que puedes apreciar como la parte delantera del coche se eleva, mientras te quedas literalmente pegado al butacón de piel. Hemos tenido ocasión de probar otros Bentley, entre ellos, el Continental GTC Speed o el Mulsanne Speed, pero la capacidad de aceleración que este coche ofrece, no la habíamos percibido todavía en ninguno de ellos y menos en un SUV.
Tomamos una carretera de curvas, es la hora de comprobar, si este Bentley es un SUV que mantiene el ADN que Bentley toda la vida ha llevado impregnado en sus modelos, y la verdad, es que nos tenemos que quitar el sombrero ante la capacidad de trazar curvas que tiene. Es evidente que sus 2,4 toneladas no juegan en su favor, pero el conjunto ofrecido por el chasis, la amortiguación y el ingenioso sistema que controla las barras estabilizadoras, hacen que puedas hacer un paso por curva verdaderamente elevando, sin que el coche tienda a penas al subviraje, teniendo en cuenta además el sistema de tracción integral encargado de evitar cualquier pérdida de tracción mediante su actuación electrónica.  

Por sacarle alguna pega, tan solo podemos decir que los frenos se agotan tras pocos kilómetros de someterlos a frenadas bruscas y constantes, algo de lo que la marca ya es consciente, y se ha puesto manos a la obra para ofrecer unos cerámicos que serán opcionales, y que mejorarán sin duda su uso en este tipo de carreteras, en las que las frenadas son continuadas.

Tras la prueba, nos preguntamos, ¿es el Bentayga un SUV racional?, quizás algunos digan que si, otros, simplemente intentarán justificar su precio que ronda los 241.000€ (el de esta unidad), pero lo que sí es seguro, es que la exclusividad tiene un precio, y el hecho de tener en tu garaje al SUV más rápido, deportivo y lujoso del mundo es algo que se tiene que pagar.

Escrito por, Miguel Ángel Solá

Agradecimientos
•    Bentley Barcelona – Cars Gallery
•    Fotografías: Javier Lorite – Cristóbal Arjona y Miguel Angel Solá
Si deseas más información acerca del Bentley Bentayga, puedes contactar con Cars Gallery, Concesionario Oficial Bentley Barcelona.
Tf.- 932 896 363

Mail: This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.

www.carsgallery.es